
Esta noche, calida, vendrás a mi te veré llegar , orgulloso, callado y ausente. Erraras entre las horas como lo haces siempre costumbre rara que adquirió tu cuerpo de respirar noche. Resumirás tu día con una mirada larga, inconsecuente, impropia quizás más perdida que tu voz entre las profundidades de tu pecho.
Estaré esperándote y vendrás a mi y no porque quieras hacerlo sino porque yo me incluiré en un espacio de tu cama. Te rondare , te rodearé con la mirada, las manos, las palabras que no digo pero que pienso, te hablare al oído como antes.
Esta noche vas a cerrar los ojos y yo voy a estar ahí metida entre tus sabanas seré cada hilo que la forma el color que las tiñe, seré la forma de tu almohada.
Esta noche quiero que duermas con mi boca cantándote al oído confesándote desde lo mas intimo de mi ser que para mi decir amor es decir tu nombre.
Estaré esperándote y vendrás a mi y no porque quieras hacerlo sino porque yo me incluiré en un espacio de tu cama. Te rondare , te rodearé con la mirada, las manos, las palabras que no digo pero que pienso, te hablare al oído como antes.
Esta noche vas a cerrar los ojos y yo voy a estar ahí metida entre tus sabanas seré cada hilo que la forma el color que las tiñe, seré la forma de tu almohada.
Esta noche quiero que duermas con mi boca cantándote al oído confesándote desde lo mas intimo de mi ser que para mi decir amor es decir tu nombre.

0 comentarios:
Publicar un comentario
¿y tus palabras que dicen?